¡Buenos días!

Sí, es una fiesta totalmente americana y no sé si me hace ilusión que se esté implantando tanto aquí pero… ¡es un filón de temas para la repostería! Qué le vamos a hacer, es así, por una vez dejamos los tonos rosas y nos lanzamos a la sangre, los muertos y el lado oscuro. Yo he decidido hacer esta super tarta de tumbas que he visto por internet en varios blogs y que yo he adaptado a mi estilo. La receta está muy reformada así que tampoco interesa mucho poner la fuente, en un inicio eran 8 huevos, una burrada para mi gusto, no llevaba leche… en fin, que he hecho otra tarta diferente. El fantasmita es de fondant. Os dejo la receta, hecha muy rápida para lo resultona que queda.

TARTA DE CEMENTERIO
Para el bizcocho:
150 g de harina
90 g de cacao
dos cucharaditas de levadura
175 g de azúcar
4 huevos
50 ml de leche
mantequilla para engrasar el molde
Para la cobertura:
200 g de chocolate para fundir
200 ml de nata para montar
Para decorar:
Galletas Oreo
Galletas rectangulares
Bizcochos de soletilla
Chocolate negro
Fondant blanco

Precalentar el horno a 180ºC.

Engrasar el molde cuadrado con mantequilla.

Mezclar la harina con el cacao y la levadura.

Por otro lado los huevos, el azúcar y batir hasta que blanqueen.

Mezclar ambas cosas hasta que no haya grumos.

Echar en el molde y hornear 20 minutos. Comprobar que esté hecho introduciendo una aguja en el centro y que salga limpia. Dejar enfriar.

Para la cobertura derretir el chocolate, al baño María. Dejar que se enfríe un poco.

Montar nata.

Añadir poco a poco el chocolate a la nata montada mezclando con movimientos envolventes. Dejar en la nevera.

Cuando el bizcocho esté frío cubrirlo con la cobertura de chocolate y meterlo en la nevera para que endurezca.

Triturar las galletas Oreo sin la crema para hacer la tierra.

Derretir un par de onzas de chocolate y utilizarlo para escribir en las tumbas.

Cortar los bizcochos de soletilla por la mitad, pintar la inscripción con el chocolate y clavar en la tarta.

Colocar gallletas cuadradas alrededor de la tarta.

Moldear el fantasmita y pintarle con rotulador de tinta comestible los ojos.
Como veis no es muy difícil, parecen muchos pasos pero os aseguro que en poco más de una hora la tendréis hecha. A los niños les encantará.

Ya que estoy aquí y hoy es 29 de octubre aprovecho para acordarme y felicitar a mi aitite que hoy hubiera hecha 97 años. Es una pena que no haya podido probar mis postres porque ¡habría sido mi catador número 1, con lo que le encantaba el dulce!
Un besazo enorme para todos (y sobre todo para él)