¡Buenos días! y soleados por fin… tengo ganas de que haga bueno en Bilbao porque parece que vivimos en un otoño continuo, tanta lluvia… si es que no me he quitado los botines todavía y veo mis sandalias esperándome y me da una penita… En fin… Hoy os traigo otro pan diferente, es un pan de patata que está estupendo. La verdad es que una vez hecho no sabe nada a patata pero supongo que se utilizaba por los antiguos pioneros irlandeses, polacos, españoles y rusos para sustituir la harina que imagino era más escasa… pero son suposiciones. Es un pan muy rico, de corteza no muy dura y que si le añadís 30 g de azúcar se convierte en un pan dulce. La receta es del libro «Pan, de la chapata al pan de centeno» de Linda Collister. Salen unos 9 panecillos.
PANECILLOS DE PATATA
400 g de harina de fuerza
25 g de mantequilla
1/2 cucharada de sal
100 g de patatas cocidas, enfriadas y aplastadas (acordaos de cocerlas antes de empezar hacer la receta para que dé tiempo a que se enfríen)
190 ml de leche tibia
7’5 g de levadura fresca de panadería
Poner en un cuenco grande la harina, agregar la mantequilla a dados y frotar con las manos hasta que se haga una mezcla que parezcan migas. Mezclar con la sal y las patatas.
Verter la leche tibia en una jarra, desmenuzar la levadura y mezclar hasta que esté desleído. Verterlo sobre la mezcla de harina y trabajar para obtener una masa firme.
Volcarla sobre una superficie de trabajo enharinada y amasarla unos 10 minutos. Devolver la masa al cuenco, cubrirla con papel film y dejar levar durante 2 horas aproximadamente hasta que doblen el volumen.
Volcar la masa levada y aplastarla para deshincharla. Dividirla en 9 partes iguales. Ponerlas en unas placas cubiertas con papel de horno y dejarlas levar una media hora tapada por un trapo.
Precalentar el horno a 200ºC.
Destapar los panes y hornear durante 15 o 20 minutos hasta que esté un poco dorado. Espolvorear con harina. Dejarlos enfriar en una rejilla.
Como veis la elaboración es parecida al resto de los panes y no hay nada mejor que el olor del pan recién hecho y probar un trocito aunque nos quememos. Mmmmm puro placer.
Un besazo a todos
Que maravilla de panecillos nos traes hoy!!! Los conocía pero nunca me he animado a hacerlos, con tu receta caerán seguro!!! Gracias guapa!!
gracias¡¡¡ anímate, son curiosos… aunque la patata no sabe mucho jejeje… pero así son más blanditos. un besazooo
Este pan tiene que estar muy bueno y creo que la patata le dará una esponjosidad extra,. Me encanta amasar a mano y como a tí el olor al hornear y comerse un trocito calentito!
eso es, se quedan unos panecillos super esponjosis, muy apetecibles… y recién salidos del horno jejeje lo mas¡¡¡
y por cierto Dulces Frivolidades, a mí también me apasiona amasar a mano, hacer pan para mí es una gozada por todo el ritual que tiene, eso me gusta mucho.
Un besazo
Hola !!!
A mi también me apasiona lo de los panes y amasar a mano, lo del pan con patata lo tengo pendiente; http://bread-and-pan.blogspot.com.es/
este es el link de mi blog, hay varias recetas de pan, creo que te va a interesar.
Un besito y felicitaciones por el blog, me quedo como seguidora.
Hola¡¡ Ya te sigo en tu blog yo también, me encanta… hace tiempo que no hago pan pero tengo muchísimas ganas de retomarlo… y más ahora que hace frío, apetece ¿verdad?
Un besazo y gracias por seguirme¡¡