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QUICHE DE VERDURAS

Hola a todos!
Hoy os traigo una receta nueva y de salado, que apetece. Es una quiche de verduras, una tarta salada que es lo mismo. La base es de pasta quebrada, una receta que podéis utilizar después para cualquier tarta desde una de chocolate hasta una de frutas. Es muy rica y no resta protagonismo al plato sino que lo aumenta. Además, es sencilla de hacer. Os lo cuento todo en la receta para que la tengáis.

QUICHE DE VERDURAS
Para la pasta quebrada
150 g harina
70 g de margarina a temperatura ambiente
1 huevo
sal

Echar un poco de sal a la harina y mezclar.

Mezclar la harina con la mantequilla poco a poco, debe quedar una especie de arena, lo que se llama un sablée.

Añadir el huevo y mezclar. Amasar un poco hasta que esté lisa pero no demasiado, no es bueno.

Esa masa envolverla en papel film y dejarla en la nevera unas horas, es mejor que esté fría para poder manejarla.

Pasado ese tiempo estirar con el rodillo y cubrir un molde desmoldable, de los que se quita el fondo.

Pinchar la masa con un tenedor para que no suba en el horno y cubrirla con papel albal.

Hornear unos 10 minutos a 180ºC aproximadamente.

Sacar y dejar enfriar.

Relleno
Un trozo de calabacín
Pimiento verde
Pimiento rojo
Cebolla
3 huevos
Un chorrito de nata para cocinar

Lavar todas las verduras y picarlas al tamaño que se quiera, si es pequeño mejor, pero que sean trozos que se vean.

Pocharlo todo en una sartén con un chorrito de aceite. Cuando esté hecho dejarlo enfriar.

En un bol mezclar los huevos y batirlo junto con el chorrito de nata.

Echar las verduras a la mezcla del bol y unirlo todo. Echar sal.

Llenar la tartaleta que hemos horneado y meter al horno hasta que se cuaje y empiece a dorarse.

Como veis es muy sencilla y os aseguro que cunde mucho, además se puede comer tanto caliente como fría. Y por supuesto la podéis rellenar de esto o de cualquier otra cosa, chorizo, jamón, setas… lo que os apetezca, siempre que las cosas que no se pueden comer crudas las hagáis antes de meterlas en el horno.
Espero que os haya gustado.
Un besazo a todos.

RISOTTO DE ESPINACAS Y MASCARPONE

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¡Buenas tardes a todos!
Hoy os quiero enseñar una receta salada que a mí personalmente no puede gustarme más. El risotto me encanta, por su jugosidad, por lo cremoso y porque pega bien con prácticamente todos los ingredientes. Este en concreto es de espinacas y mascarpone, ese queso tan suave y cremoso, seguro que os gusta. La receta ya ni siquiera recuerdo de dónde la saqué porque llevo mucho tiempo haciéndolo pero puede que sea del blog «las recetas de glutoniana». Pero ahí os dejo cómo lo hago yo:

RISOTTO DE ESPINACAS Y MASCARPONE (para 2 personas)
1 diente de ajo
1/2 cebolla cortada muy fina
unos 200 g de espinacas
1 vaso de arroz de grano medio o de grano corto, nunca de grano largo
1 litro aproximadamente de caldo de verduras (si es natural mejor, si no el de Aneto creo que es el más sabroso)
1 cucharada sopera colmada de queso mascarpone
Sal
Aceite

Lavar las espinacas y cocerlas en agua hirviendo hasta que estén hechas, que hayan perdido parte de su rigor. No será mucho tiempo. Sacarlas, secarlas y dejarlas enfriar. Trocearlas una vez estén frías y reservar.

En una cazuela poner el caldo a calentar, debe hervir. Reservar.

En una cazuela pone un poco de aceite y a fuego medio ir pochando el ajo y la cebolla poco a poco con cuidado de que no se queme.

Una vez que se hayan pochado, que estén más blanditos echar el arroz, subir el fuego a más potencia y rehogar el arroz para que coja el sabor de los ingredientes. Echar sal pero no demasiada porque los caldos suelen tener bastante sabor y es fácil que quede salado.

Después echar el doble más un poco más de la medida que hemos puesto de arroz, de caldo hirviendo. Cuando toda la superficie del arroz hierva bajar la temperatura a la mitad. Se debe remover de vez en cuando para que el arroz vaya soltando el almidón y dé ese aspecto cremoso. Siempre que se vaya quedando seco el arroz ir echando más caldo y seguir removiendo. Puede tardar unos 20 minutos aproximadamente. Probar y si fuera necesario rectificar de sal.

Cuando hayan pasado unos 10 minutos echar las espinacas y remover.

Al final, cuando el arroz esté ya blandito y prácticamente hecho echar una cucharada colmada de queso mascarpone y remover hasta que se haya disuelto completamente.

El arroz estaría hecho pero antes de comerlo es mejor dejar reposar unos minutos para que se asiente.

De verdad que es un arroz riquísimo y sencillo de hacer.
Espero que os haya gustado.
Un besazo a todos

PIRULETAS DE QUESO

6 respuestas

¡¡Hola a todos!!
¿Queréis quedar como nadie, que todo el mundo se sorprenda y ser un poquito originales? Pues animaos a hacer las piruletas de queso como entrante para cualquier cena. Son tan fáciles que casi da vergüenza llamarlo receta y sin embargo están muy ricas y admiten tantas posibilidades como se os ocurran.

PIRULETAS DE QUESO

brochetas de madera
sobre de quesos rallados variados
jamón, bacon, semillas de amapola, sésamo… todo lo que se os ocurra

Sólo hay que tener unas brochetas de madera y un sobre de varios quesos rallados.

Se precalienta el horno, se coloca cada palo un poco separado del siguiente porque se expanden, se echa en un extremo un buen montón del queso (echad suficiente para que queden tiesas y no se doblen como me ha pasado a mí en la de la izquierda) y se mete al horno.

En diez minutos, cuando empiece a dorarse las sacáis, las dejáis enfriar y ya está.

Facilísimo y con un resultado super aparente. También se les pueden poner trocitos de jamón, o de bacon por ejemplo y hacerlas variadas. Espero que os hayan gustado.
Un besazo

FOCACCIA

2 respuestas

¡¡Buenos días a todos!!
Hoy os quiero enseñar una receta riquíiiisima que os soluciona una comida. Pero también admite muchas otras posibilidades como cortarla en trozos y servirla como aperitivo por ejemplo. Les gustará a todos, os lo garantizo. Es la focaccia italiana, que es algo a medio camino entre una pizza y un pan. Tiene ingredientes por encima, por eso puede recordar a una pizza, pero el sabor es diferente, más parecido a un pan esponjoso por dentro. Muy rico, tenéis que probarla.
Además, podéis ponerle por encima todo lo que se os ocurra, yo he utilizado tomatitos cherry, aceitunas negras, cebolla, bacon, queso y todo espolvoreado con hierbas provenzales. Una maravilla, os lo aseguro. Ahí va:

FOCACCIA

450 g de harina de fuerza
25 g de levadura de panadería
225 ml de agua
1 cucharadita de sal
5 g de azúcar
2 cucharadas de aceite de oliva (quizás algo más si la masa está muy seca)

Poner agua templada en un bol con el azúcar y la levadura. Mezclarlo todo y dejarlo reposar 10 minutos.

Tamizar la harina con la sal. Ir añadiendo poco a poco los ingredientes anteriores. Lo último el aceite, cuando lo demás ya esté bien incorporado.

Amasar con cuidado, como el pan, de forma que quede una masa fina y nada pegajosa. Dejar reposar durante 1 hora cubierta por un paño húmedo en un lugar con calorcito y sin corrientes. Yo lo puse junto a la calefacción. Tiene que doblar su volumen, si veis que no lo ha hecho dejadlo un poco más.

Precalentar el horno a 180ºC. Estirar la masa con la punta de los dedos sobre la bandeja de horno con papel vegetal. Una vez estirada hacerle con el dedo los característicos agujeros.

Después añadirle todos los ingredientes que queramos, en este caso primero las hierbas provenzales y después lo demás para terminar con un poco de sal por encima y un chorrito de aceite. Dejar reposar 10 minutos a temperatura ambiente.

Hornear durante unos 20 minutos.

Espero que os haya gustado, muy rica, os lo aseguro.
Un besazo a todos

PANECILLOS DE PATATA

7 respuestas

¡Buenos días! y soleados por fin… tengo ganas de que haga bueno en Bilbao porque parece que vivimos en un otoño continuo, tanta lluvia… si es que no me he quitado los botines todavía y veo mis sandalias esperándome y me da una penita… En fin… Hoy os traigo otro pan diferente, es un pan de patata que está estupendo. La verdad es que una vez hecho no sabe nada a patata pero supongo que se utilizaba por los antiguos pioneros irlandeses, polacos, españoles y rusos para sustituir la harina que imagino era más escasa… pero son suposiciones. Es un pan muy rico, de corteza no muy dura y que si le añadís 30 g de azúcar se convierte en un pan dulce. La receta es del libro «Pan, de la chapata al pan de centeno» de Linda Collister. Salen unos 9 panecillos.

PANECILLOS DE PATATA

400 g de harina de fuerza

25 g de mantequilla

1/2 cucharada de sal

100 g de patatas cocidas, enfriadas y aplastadas (acordaos de cocerlas antes de empezar hacer la receta para que dé tiempo a que se enfríen)

190 ml de leche tibia

7’5 g de levadura fresca de panadería

Poner en un cuenco grande la harina, agregar la mantequilla a dados y frotar con las manos hasta que se haga una mezcla que parezcan migas. Mezclar con la sal y las patatas.

Verter la leche tibia en una jarra, desmenuzar la levadura y mezclar hasta que esté desleído. Verterlo sobre la mezcla de harina y trabajar para obtener una masa firme.

Volcarla sobre una superficie de trabajo enharinada y amasarla unos 10 minutos. Devolver la masa al cuenco, cubrirla con papel film y dejar levar durante 2 horas aproximadamente hasta que doblen el volumen.

Volcar la masa levada y aplastarla para deshincharla. Dividirla en 9 partes iguales. Ponerlas en unas placas cubiertas con papel de horno y dejarlas levar una media hora tapada por un trapo.

Precalentar el horno a 200ºC.

Destapar los panes y hornear durante 15 o 20 minutos hasta que esté un poco dorado. Espolvorear con harina. Dejarlos enfriar en una rejilla.

Como veis la elaboración es parecida al resto de los panes y no hay nada mejor que el olor del pan recién hecho y probar un trocito aunque nos quememos. Mmmmm puro placer.

Un besazo a todos