¡Hola a todos!

Hoy tengo ganas de volver a mis orígenes, de recordar viejos tiempos cuando sólo hacía dulces. Me sigue encantando hacerlos, los podéis ver en el blog, pero lo salado está ganando terreno porque es más sencillo de comer día a día. Así que no está mal recuperar de vez en cuando esas recetas que antes hacía sin parar. Como estas magdalenas. La receta es de Alma Obregón, ya sabéis que es la reina de los cupcakes jeje, aunque hace otras muchas cosas. Yo no las decoré, las prefería sencillas para el desayuno así que únicamente las cubrí con azúcar. Os dejo la receta, id calentando el café para untar:

MAGDALENAS DE VAINILLA
115 g de mantequilla en pomada
220 g de azúcar (y algo más para espolvorear por encima)
3 huevos
200 g de harina
1 y 1/2 cucharadita de levadura
120 ml de leche
1 cucharadita de extracto de vainilla

Precalentar el horno a 180ºC.

Preparar la bandeja de horno con los moldes de magdalenas y los papeles.

Tamizar la harina con la levadura en un cuenco.

Batir la mantequilla con el azúcar hasta que se integren y la mezcla se aclare.

Añadir los huevos y seguir batiendo.

Echar la mitad de la harina y con la pala esta vez seguir batiendo pero a menos velocidad.

Echar la leche y el extracto de vainilla y seguir incorporando.

Agregar el resto de la harina y hacer lo mismo. Que la mezcla sea homogénea.

Llenar cada cápsula unas 3/4 partes.

Espolvorear azúcar por encima sin mezclarlo.

Hornear 20-25 minutos hasta que estén doradas.
Sencillas y siempre buenísimas, ¿qué más se puede pedir?
Un besazo a todos.